Finalmente Itá Pucú logro ser la mejor batería de este 2010, con un resultado que corono la vuelta de los hno. Altamirano, a la verde y blanca.
Una vez conocido el resultado la hinchada estallo en un grito, que rápidamente obligo a sonar sus instrumentos mostrando, de esta manera que fue la mejor batería del carnaval nacional del Iberá.
Mientras que su presidente recuperaba el semblante, triunfo que no basto para cambiar el humor picaresco de Miguel Cemboraín, bautizado el “señor del carnaval”, en la edición 2010.