El Intendente Municipal Jorge Luis Molina entregó este jueves 10 de junio los premios del Concurso “Mujer correntina en el Bicentenario”, organizado por la Dirección Provincial de la Mujer en Coordinación con la Dirección de Cultura Municipal, cuya ganadora fue la Sr. Mabel Mambrín, destacando en su poesía a Felisa Fernández Inciarte, Directora del Taller “La Nueva Semilla”. Además participaron las escritoras Perla Milich destacando a la Sra. Ángela Faustina Della Rosa de Garrido; Amalia Y. Arias destacando a la Sra. Prof. Gumercinda Codello de Colombi; y Elena Zabala destacando a la Sra. Mercedes Chamorro de Asuad.

Obra Ganadora

Mujer, Madre Espiritual, Maestra iluminadora por Dios, fiel a tus principios “dar sin esperar”.
Acunas en tu regazo un puñado de niños y…tus brazos se vuelven tentáculos abrazando y besando.
Reflejas a Cristo en tu dulzura de Santa.
Mujer pequeña, humilde, cabellos nevados.
El tiempo va dejando sus huellas, mas la siembra comenzada arderá rejuvenecida.
En la llama de amor que tu encendiste acoges  a los niños que no tienen hogar, y ovillando los días, guardas el arco iris que Jesús te ha prestado.
Eres la obrera que pinta en los niños un bello paisaje, donde la amistad es un himno que brota del alma. Compartes con ellos sus alegrías y el pan en la resaque Dios Providencia deja a tu puerta.
Tus manos laboriosas nunca descansan. Anónima es tu obra.
Tu objetivo mas declina, porque pintas alitas blancas en rostros oscuros o miradas que no miran.
Las manitas de tus niños reciben tu cariño y un abrazo entrañable de MAMÁ FELICITA como esencia de un eterno milagro.
Amigos entrañables llaman a tu puerta o dejan en silencio frutos y mieles para aquellos duendes que a tu lado marchan. En tu pecho abrigas un deseo incontenible de cubrir sus cuerpos con ropa abrigada cuando el frío aprieta. Y es entonces cuando elevas tus manos dando gracias a Dios de la ida por tanta bondad.
Por manos anónimas, un día inesperado la casa de nuestros niños despertó en llamas. Nadie imagino lo que el destino lo tenia preparado. El taller “La Nueva Semilla” que inicio sus actividades en 1992, con pequeñas cosas, donaciones y mucha ilusión  se opaco, dejando el alma desolada.
Lentamente el sol de un nuevo día hizo sentir su calor en toda la comunidad que extendió sus manos para volver a empezar.
Unidos en la fe se formo una gran cadena de solidaridad que en muy poco tiempo logro que este humilde hogar impregnado de amor volviera a florecer.
No dejemos que el tiempo que avanza implacable te cambie la estampa de mujer ideal.
Se adivina la ternura en tus manos inquietas, controlando, enseñando, evangelizando, con una paciencia que jamás acabara.
Que un sendero de flores perfume tu camino y te encuentres siempre rodeada de los que te apoyan.
Llevan contigo la pasión de darte y no conformarte con lo eres. No limitas tus esfuerzos ni acortas tus aspiraciones.
Eres la planta que mece sus ramas cual brazos extendidos y se abren implorando una grata bendición.
Tu cuerpo pequeño y frágil es acariciado por el viento y así te sientes erguida sobre la tierra.
Llevas el sentimiento contigo en la tenaz locura de ir y venir.
El taller “La Nueva Semilla” es la esencia del sentimiento.
La encierra cada palabra como agua pura y cristalina regando la cosecha  de aquellos que la aman.
Felicita va mas allá regalando todo a la niñez para que nunca falte el pan en el Taller, porque lleva en el alma como lema: “EL SEÑOR ESTÁ CON NOSOTROS”.


Autora: Mabel Mambrin